¡Buenos días!

Hoy os hablo de otro juego de INFANITY, esta vez para trabajar las emociones. Está recomendado para niños y niñas de entre 4 y 7 años, pero creo que puede ampliarse y adaptarse a niños de otras edades, ya que propone más de 20 actividades en total. A continuación os cuento más.

QUÉ CONTIENE EL JUEGO

• 20 cartas de emociones
• 10 cartas con diferentes situaciones y preguntas
• 10 cartas de gestión de emociones
• 30 fichas circulares con acciones y elementos cotidianos
• Lámina de una cara para representar las diferentes emociones con ojos y bocas
• Ruleta de emociones
• Dado con propuestas de actividades
• Comecocos con propuestas de actividades
• Póster con consejos sobre las emociones y el respeto hacia los demás

Creo que con la descripción del contenido, ya podéis haceros una idea de lo “guay” que es el juego y la cantidad de aspectos que podemos trabajar con él. Además, en la guía que incluye, vienen 24 actividades con los diferentes materiales, cuyos objetivos son:

• Nombrar e identificar emociones
• Relacionar acciones o situaciones con cada emoción
• Expresar emociones
• Descubrir que las emociones no son ni buenas ni malas
• Gestionar las emociones ante conflictos
• Trabajar la empatía y el respeto hacia los demás

CARTAS

Encontramos unas cartas que nos definen algunos sentimientos, como puede ser la frustración, la vergüenza… Por delante tienen una imagen que las representa, y en el dorso nos define cada una.

 

Por otro lado, vienen unas cartas con una situación dibujada y en el dorso nos explica esa situación y nos hace preguntas sobre esa situación (¿Cómo se siente la niñas?, ¿Cómo reaccionarías tú?).

FICHAS CIRCULARES

Con ellas, podemos crear e inventar historias. Si cogemos una tarjeta de las anteriores con una emoción, podemos coger unas fichas circulares al azar y que los niños/as, teniendo en cuenta la emoción que les ha tocado y los elementos de las fichas, inventen una historia.

LÁMINA CON LA CARA DE UN NIÑO

Viene con diferentes ojos y bocas intercambiables. Podemos pedir a los niños que representen una emoción concreta. Después, pueden imitarla ellos mismos.

COMECOCOS

Cogemos el comecocos y cada niño va diciendo un número de 1 a 9. Movemos el comecocos con los dedos y escoge una de las caras que aparezcan. Debajo se esconde una acción que deberá realizar (por ej. si elige la cara de MIEDO, contará qué cosas le dan miedo).

DADO

Genial para trabajar con grupos. Cada niño/a tira el dado y dependiendo del color e imagen que salga, hará una actividad u otra: explicar una situación, inventar una historia, hacer mímica…

Éstas son algunas de las propuestas de cómo utilizar el juego, pero hay muchísimas más.

Me ha parecido un juego muy interesante y muy útil para trabajar las emociones, la resolución de conflictos etc. Temas un poco más complicados de tratar pero que a través del juego pueden resultar más sencillas.

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