¿QUÉ ES?
El retraso madurativo es un término de diagnóstico subjetivo empleado cuando se detectan dificultades indeterminadas en la madurez de niños y niñas con edades comprendidas entre los 2 y los 6 años.
¿EN QUÉ CONSISTE?
El retraso afecta a diferentes áreas del desarrollo, como:
- Uso del lenguaje
- Motricidad
- Desarrollo cognitivo
- Socialización
Un dato “tranquilizador” es que ese retraso suele ser de 1 ó 2 años y además es temporal. El desarrollo de los niños y niñas con retraso madurativo progresa a su propio ritmo hasta llegar a normalizarse.
El diagnóstico de retraso madurativo es algo subjetivo, ya que se sabe que existe un problema, pero la edad a la que se suele diagnosticar es demasiado pronto como para dar un diagnóstico concreto. Algunas patologías no son fácilmente distinguibles a estas edades. En el caso de que el ritmo de progreso del que se hablaba anteriormente no existiera, hablaríamos de un trastorno del desarrollo. Precisamente su duración y mejoría es lo que le distingue de otras patologías más complejas.
CARACTERÍSTICAS
El retraso madurativo es un trastorno muy común en la primera infancia. Se puede detectar desde el nacimiento o según va creciendo, y pueden detectarlo tanto los propios padres como los educadores, viendo que el menor no evoluciona al mismo ritmo que los demás.
Para considerar que estamos ante un caso de retraso madurativo, éste debe afectar al menos a 2 ó 3 áreas a la vez, las cuáles mencionamos más arriba. En caso de afectar solamente a un área, no hablamos de retraso madurativo, sino de un retraso específico de ese área (p. ej. retraso específico del lenguaje).
CAUSAS
Las causas más frecuentes son:
- Nacimiento prematuro: problemas durante el embarazo, bajo peso al nacer…
- Ausencia de estimulación: algunas situaciones hacen que los menores no reciban la estimulación necesaria. Precisamente a estas edades en que se dan muchos casos de otitis, provoca que la audición se vea disminuída, y está disminución, a su vez, puede provocar retrasos en el lenguaje.
- Causas desconocidas
TRATAMIENTO
El primer paso que debemos dar si tenemos sospechas de que algo no funciona bien, es acudir al pediatra. Esto ayudará a una detección precoz, algo muy importante para estudiar su posterior tratamiento lo antes posible y poder llevarlo a cabo. La colaboración de los educadores y los profesionales de atención temprana tienen un papel muy importante en la evolución del tratamiento.
La estimulación en casa también es muy importante. Para ello, sólo basta con llevar a cabo algunos juegos o actividades que trabajen las áreas afectadas. El equipo de atención temprana nos puede dar algunas recomendaciones.
PRONÓSTICO
El pronóstico de estos menores es favorable, ya que recuperan su desventaja respecto a los demás con el paso de tiempo. Para ello, es muy importante que reciba el tratamiento adecuado a sus características, pero las expectativas pueden empeorar si no se trata correctamente.